La Vida del Loco

El Loco es vitalidad, es entusiasmo, es ilusorio, y es vivir el momento.

Este arquetipo representa la adolescencia y la inmadurez. Su viaje por la vida es lógica, pues la persona tiene que formarse, conocerse a si misma y madurar. Es necesario hacer su viaje, pasar por todas sus facetas y llegar a la cima.

Es el principio, el primer paso para crecer y pasar de un ciclo a otro.

Camina ajeno a su entorno, su inconsciencia le hace feliz, no ve el peligro, ni tampoco la enseñanza de cada paso que da. Va ligero de equipaje, pues piensa: “Dios Provee”, es amigo de la naturaleza, le gusta la belleza, hace frío pero él no lo siente, sólo ve el hermoso sol que derrite el frío hielo. Vive el momento y no sabe lo que es la responsabilidad o el compromiso. Sencillamente es, puede ser cariñoso y amable o tirano y cruel. Es egoísta, aunque puede ser un egoísta que comparte algo de lo que tiene o un egoísta huraño y avaro. Tampoco conoce el esfuerzo ni la preocupación.

Su viaje es el eslabón que nos lleva del Mundo al Mago, es un rito de paso. Cuando se decide a iniciar su viaje, a pasar a la acción, comienza el fin del caos para pasar a las formas.

Transcender al El Loco es necesaria, sino estaremos en peligro. Es un arcano sin número, está fuera del orden establecido.

¿Cómo afecta su paso por los diferentes planos de la existencia? ¿Qué puede ocurrir si se nos aparece el Loco que al ser un arcano mayor influiría en los cuatro planos de nuestra vida?

Físico: (salud, familia, trabajo, dinero): Enfermedades que tienden a perturbar y desequilibrar a la persona. Se aleja de la familia y no tiene capacidad para formarla, ya sea por su falta de responsabilidad o por su siempre deseo de independencia. En el trabajo a no ser que tenga una profesión independiente no conseguirá el éxito. Y en cuanto al dinero le resultará muy difícil mantenerlo, y cierta incapacidad, aunque sea temporal, para ganarlo.

Mental: Mente dispersa e irreflexiva, no recuerda.

Emocional: Total inestabilidad.

Espiritual: Totalmente ajeno a ella, o bien busca y busca pero nunca encuentra, o cree no encontrar.

Para poder dominar a nuestro Loco interior, tenemos que conocer su especial naturaleza, comprender el caos y no quedarnos parados en el. Todo es evolución y movimiento sin fin.

Cuando te encuentres con alguien que vive parado en El Loco, no permitas que afecte a tu vida, sigue tu camino sin prestarle atención pues te puede destrozar. Suelen ser inteligentes y manipuladores, arrasan con la vida de los demás.

Como he dicho antes, pasar por El Loco es necesario para nuestra evolución, antes de aprender se presenta el caos, pero maduramos y transcendemos.

Personalmente conozco a hombres que viven parados en El Loco y más concretamente a uno. Esta persona la única virtud que tiene es su responsabilidad en el trabajo, por lo demás es totalmente irresponsable, totalmente incapaz de comprometerse, es totalmente inestable en todos los sentidos, hace daño al prójimo con las palabras que usa, que para él son totalmente normales y aceptables, miente y manipula, es inculto e incapaz de mantener una conversación de adultos. Vive totalmente el momento y hace y actúa sin pensar en las consecuencias. Prácticamente no tiene amigos, pasa mucho tiempo solo y se aburre soberanamente. No tiene hobbies, en casa no sabe estar y si no trabaja se pasa el tiempo de bar en bar.

El viaje del El Loco puede ser desastroso tanto para el que se para en él como para las personas que se dejan influir por él.

Cuando en un momento de tu vida estés viviendo la energía de El Loco, aprovéchala para crecer, evolucionar y llegar más allá. No te pares.

Escrito por Mercedes Mata